Compostela

Abierta al público desde el 7 de septiembre hasta el 7 de octubre de 1978, la exhibición titulada Compostela consistió en la presentación de 91 esculturas de pingüinos realizadas por Francisco Vázquez Díaz (Compostela). La misma cuenta con un texto del Dr. Arturo Dávila y el diseño de sala de Carmen Ana Pons de Alegría. Vázquez Díaz obtuvo su apodo (Compostela) por su lugar de crianza: Santiago de Compostela, aunque había nacido en Galicia, y llegó a Puerto Rico por invitación del Rector don Juan B. Soto para dar unas demostraciones de talla en 1940. Entre las obras exhibidas en esta ocasión, el escultor coloca a estas aves –por las cuales se le reconoce hasta hoy– haciendo deportes, bailes, representando oficios y representando el amor, la vejez, la muerte, entre otros temas. Aunque Compostela tallaba principalmente madera, en esta muestra incluyó once piedras con fósiles provenientes de Barranquitas, las cuales pulió.